El gran reclamo, o los grandes reclamos, del Santander Music Festival eran, sin duda, Belle & Sebastian y los Dandys Warhols. Ambos pocos frecuentes en las listas de grupos de la ingente masa festivalera de este país (muchos, la verdad, muy prescindibles). El relleno, el picoteo, no era malo: The Wave Pictures, White Lies, La Habitación Roja (¿cuántas veces puede llegar a ver uno un mismo grupo? con La Habitación Roja ya no llevo ni la cuenta), Dorian, We Are Standard, Delorean... Todo apuntaba a un gran festival, y en parte así fue.
Resumen meridianamente claro y bipolar del directo de dos grandes bandas en los 90 hoy:
Belle & Sebastian: líricos, afortunados, solventes, técnicamente impecables, versátiles, preciosistas...
Por contra, Dandy Warhols: erráticos, pajilleros, cirujados (musical y epidermicamente), aburridos, decadentes (pero en el mal sentido)...
(Sólo se salvó Zia de los Dandy Warhols -aunque tampoco se veía nada entre tanto humo y sombras-. Aunque, ay, qué lejos parecían esos tiempos en que tocaba semidesnuda).
Añadiría, del resto, que:
White Lies: mucha artillería inicial (gastaron sus mejores temas para abrir) y deslucimiento progresivo posterior. Unos Joy Division que escuchaban de adolescentes AC/DC.
Dorian: Bellos y eufóricos, aunque sus letras siempre me han parecido poco literarias. Eso sí, deberían estar en una fiesta perfecta. Su "A cualquier otra parte", un himno innegable de esta última década.
The Wave Pictures: sólo pude escucharles de fondo, como una radio, esa radio ideal en que Hefner suena hasta en las habitaciones de las chicas guapas.
Sidonie: el grupo con mayor ojeriza del momento. No fui a verlos (nunca me han ido o dejado de ir), pero por qué hoy tienen menos crédito que un político transfuga, si cuando comenzaron se les amaba sin condiciones. Qué cosas.
Pero, lo mejor (más que los Belle & Sebastian) han sido Lourdes y Javi. No se puede ser mejor que su alma dulce y delgada. También, claro, Javier M. Llamazares. Gracias por todo, Javi, y a la gente de la Librería Gil (asistentes y personal). Hay una foto que me hicieron que tengo unas ganas terribles de colgar aquí. Un agradable fin de semana, único y delicioso, como devorar tostadas calientes con hambre.
[Estos Belle & Sebastian para todos ellos. Música, libros y buena gente como vía perfecta para salvar la vida o a uno mismo (difícil, aunque posible de vez en cuando]
LA LABOR DEL TERMINATOR: Tomás Soler Borja.
Hace 1 día
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