A veces se aparece a mí
y me tiro a sus pies
de sal y mugre
a rogarle el milagro
de su presencia,
su agresión sin fin
(me suele morder la base del cuello)
y esa especie de calor tenso
que irradia su boca muy abierta.
Creo que sueño a menudo
con su desnudez blanca y carnal.
Chloë... Chloë...
Para los que estamos solos
(para los que estáis solos),
nos queda Chloë.
Fuera hace frío
y Chloë guarda algo así
como cierta dignidad felina
en su pelo rubio
de animal hermoso
que roza algo contra los muslos.
Para los que estamos solos
(para los que estáis solos),
nos queda Chloë.
[Black Rebel Motorcycle Club, rock n´roll]
NOVELA: Javier Mateo Hidalgo.
Hace 28 minutos
We LUV Chlöe
ResponderEliminarAnd we LUV chloë too
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